miércoles, 24 de octubre de 2012

El Partido y la Organización (Parte 5)

¡Joven, Empínate!

"La juventud ha de ir a lo que nace, a crear, a levantar a los
pueblos vírgenes, y no estarse pegada a las faldas de la ciudad
como niñotes que no quieren dejarle a la madre el seno.
"  José Martí.

En la consecución de los sucesos revolucionarios que se vienen dando en nuestra revolución bolivariana, nuestro pueblo se pregunta cada vez que sale de una batalla electoral, ¿y ahora que hacer?, Sí, ¿que hacer?, esta pregunta surca el imaginario popular cada vez que se plantean cruzar la línea del no retorno como lo señala el comandante HUGO CHÁVEZ, en la propuesta de la patria, ¿A través de qué medio se concreta la revolución logrando su irreversibilidad?, en este sentido el pueblo clama por la organización revolucionaria del partido, un partido de nuevo tipo, que se ajuste a esta nueva etapa dejando atrás las superadas, y garantice la voluntad de una clase sobre la otra, como única vía para alcanzar la suprema felicidad posible como lo señalara nuestro libertador Simón Bolívar.

Nuestro partido P.S.U.V. es relativamente joven, pero no por ello se exime de las debidas observaciones, en este sentido el pueblo vigilante y ceñudo se mantiene alerta, la vanguardia de nuestro pueblo, es decir, el proletariado se convierte en un cancerbero a la hora de analizar la composición de clases de nuestro partido, pues, dentro del planteamiento teórico hay que tener presente lo que ya en otros tiempos se viene señalando. “No puede concebirse que la construcción del socialismo se inicie con un partido de la clase burguesa, con un partido que tuviera entre sus integrantes una buena cantidad de explotadores y éstos fueran encargados de fijar su línea política.” (1)

La concepción del partido como instrumento para hacer la revolución socialista es de vital importancia, de tal manera que el proletariado ya viene alertando en este sentido con su peculiar forma de expresarse a través de la voluntad popular, expresada en las elecciones del pasado 7 de octubre, a la luz de los acontecimiento revolucionarios se hace necesario el estudio exegético de las palabras que engloban los cinco objetivos históricos de nuestra revolución, entendiendo que este es el programa que echará adelante nuestro partido. Si, en términos concretos decimos que estos objetivos están inmersos en la materialización de la revolución socialista. “La misma palabra Revolución, en esta América de las pequeñas revoluciones, se presta bastante al equívoco. Tenemos que reivindicarla rigurosa e intransigentemente. Tenemos que restituirle su sentido estricto y cabal. La revolución latino-americana, será nada más y nada menos que una etapa, una fase de la revolución mundial. Será simple y puramente, la revolución socialista. A esta palabra, agregad, según los casos, todos los adjetivos que queráis: "anti-imperialista", "agrarista", "nacionalista-revolucionaria". El socialismo los supone, los antecede, los abarca a todos.”(2)

De este modesto análisis se desprende que sólo con un partido verdaderamente revolucionario será posible la construcción del socialismo en la República Bolivariana de Venezuela. Un partido que conciba o abrace una verdadera doctrina científica, es decir, el MARXISMO, como doctrina inherente del socialismo científico. Ya experiencias a lo largo de la historia nos lo vienen señalando, para hacer una verdadera revolución hace falta el partido como jefe político del proletariado. "Para realizar la revolución, hace falta un partido revolucionario. Sin un partido revolucionario, sin un partido revolucionario creado sobre la teoría revolucionaria marxista-leninista y en el estilo revolucionario marxista-leninista, es imposible conducir a la clase obrera y las amplias masas populares a la victoria en la lucha contra el imperialismo y sus lacayos.”(3)

Se requiere un partido con la suficiente pericia doctrinaria, juicio crítico, inundado de criterios científicos. Parafraseando a Mao Tse-tung: “Para atacar a nuestros verdaderos enemigos y para distinguir a los auténticos amigos de los verdaderos enemigos, tenemos que hacer un análisis general de la condición económica de las diversas clases de la sociedad venezolana y de sus respectivas actitudes hacia la revolución bolivariana”. Es en este escenario donde el imperialismo ha mostrado su táctica e históricamente ha cosechado los frutos según sus intereses, pues, hacer el análisis fuera de los intereses que alberga una u otra clase dentro de la sociedad, no sólo nos resta méritos como revolucionarios sino que nos incapacita para formar parte del partido, arrojándonos en los errores una y otra vez. “No nos llamemos al engaño: La formación socioeconómica que todavía prevalece en Venezuela es de carácter capitalista y rentista. Ciertamente, el socialismo apenas ha comenzado a implantar su propio dinamismo interno entre nosotros. Éste es un programa precisamente para afianzarlo y profundizarlo; direccionado hacia una radical supresión de la lógica del capital que debe irse cumpliendo paso a paso, pero sin aminorar el ritmo de avance hacia el socialismo”. (4)

Notas:
1. El partido marxista-leninista, Ernesto Che Guevara.
2. 1928 Mariategui aniversario y balance. * Editorial de "Amauta", Nº 17, Año II, Lima, septiembre de 1928. Tomo 13.
3. Mao Tsetung obras escogidas de tomo IV. ¡Fuerzas revolucionarias del mundo, uníos, luchad contra la agresión imperialista! * Noviembre de 1948
4. Hugo Chávez. En la presentación de la propuesta de la patria.

Escribe: Eliezer Mora.
Equipo de Redacción: Ana Miliani, Olga Espinoza, Alexander Escobar, Willis Jiménez, Mónica Barahona, Jorge Bonilla, Krisneydi Gordillo, Dulce Camacaro, Martin Giménez, Simón Bonilla, Segovia Daniel, Edgar Castro, Miguel Balustren, Miguel Gonzáles, Anyelo Cruces.

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